Vivir es un milagro que se puede eternizar a través de una pintura. Hay alegría en mi corazón cuando al final de una noche volteo y miro el lienzo terminado. Pero la vida sucedió mientras pintaba. De manera que mi alegría no depende del producto sino en el proceso. No pienso mientras pinto --esa es mi libertad al no ser académico--. Soy autodidacta y mi único fin es lograr plasmar un sentimiento mientras Soy. A veces lo logro y otras no... pero no importa pues mientras respire habrá una nueva oportunidad; un nuevo lienzo frente a mis ojos. El color, solo el color y el movimiento... danzar y liberar mi hemisferio cerebral para que solo vague y cree, y haga lo que tenga que hacer. Sin detenerse mucho, solo moverse... ser y volver a moverse a cada pincelada. La música fluyendo en el aire y claro, un buen vino en mis venas... Que la vida fluya, que el milagro siga... mi alegría de vivir...!